17/1/09

La Luna del lobo

La Luna de enero se levanta cuando soplan los fieros vientos de invierno. Como los lobos asediaban los primeros poblados, esta Luna del profundo invierno, ronda y gruñe, hambrienta y a la caza. Dentro, nos reunimos al calor del hogar. Dibuja un manto de protección y fuerza y viaja hacia el interior. Deja que la oscuridad de la estación arrope tus planes y tus sueños. Las visiones interiores aparecen, incitándonos a prever lo que deseamos plantar en el próximo ciclo de fertilidad. En el mundo espiritual y en la tierra, la nueva vida reúne sus energías y se prepara. Tómate el tiempo de contemplar en quietud lo que está por venir. Concéntrate en la preparación y la protección en compañía de seres queridos, porque la fuerza aumenta en tiempos sosegados y se nos prepara para la estación que está a punto de llegar.
Luna de nieve, Luna fría, Luna tranquila, quédate.
¡Qué la protección y la fuerza crezcan en el interior,
Inanna, Sarasvati, Hera y Sinn,
tejed nuevos comienzos ahí en las profundidades interiores!
Autor/a: Dallas Jennifer Cobb

9/1/09

Dedicatoria

Al principio no estabas muy seguro
de qué camino tomar,
-el izquierdo, el derecho, la cumbre o el estanque-
tampoco sabías cómo servir la cerveza
o cortar el pastel,
pero aprendiste a tiempo y seguiste adelante.

Aunque otros caminos eran más anchos,
llanos y nuevos,
un antiguo camino surgió bajo tus pies
y lo seguiste,
lo estudiaste y creciste y hablaste con las
almas compañeras que fuiste encontrando.

Ahora te yergues fuera del tiempo y del espacio,
para consagrarte entre los Sabios.
En ese lugar las hojas de los árboles se inclinan para escuchar.
En los cielos, la Luna brillante es tu testigo.

Dices "Soy bruja". Pronuncias las palabras tres veces
y lo que digas a partir de entonces será.

Autora: Elizabeth Barrette

1/1/09

Año Nuevo en Dartmoor

En esto consiste la novedad: en cada pequeño y chabacano
Obstáculo recubierto de cristal, cada uno con su peculiaridad,
Centelleando y tintinando con falsete de santo. Tan sólo tú
No sabes qué hacer con este repentino terreno resbaladizo,
Con este ciego, blanco, espantoso, inaccesible declive.
No hay manera de aprehenderlo con las palabras que conoces.
No hay manera de llegar a él, ni en elefante, ni sobre ruedas, ni a pie.
Nosotros hemos venido aquí tan sólo a mirar, y tú eres demasiado nueva
Como para querer el mundo en un sombrero de cristal.



Sylvia Plath